Manual básico compostaje

¿Qué es compostar?

Compostar es un proceso controlado de descomposición de la materia orgánica, gracias a la actividad de los seres vivos, que resulta en un producto estable llamado compost. En otras palabras, el proceso de compostaje es una trasformación de la materia “muerta” en fertilizante natural semejante al proceso que ocurre en la naturaleza aunque más optimizado ya que se realiza de una forma rápida y eficiente.

La degradación del material biodegradable es realizada por seres vivos microscópicos, microrganismos y pequeños invertebrados, en presencia de aire y agua.

Además, el compostaje produce un material con características que permiten mejorar la calidad de los suelos y ayudar a las plantas a desarrollarse.

Razones para compostar

•         El compost es un materiral rico en nutrientes que mejoran el desarrollo de las plantas

•         El compost actúa como una esponja en el suelo, ayudando a retener elementos esenciales para la plantas:   Agua   Nutrientes   Aire

•         El compost ayuda a mejorar las características de los suelos, sobretodo de aquellos que son muy arcilloso o arenosos, proporcionándoles una mejor estructura

•         Los suelos ricos en compost se verán menos afectados por la erosión

•         El uso de compost aumenta la cantidad de nutrientes en el suelo, reduce el uso de fertilizantes sintéticos, aumenta la productividad y la calidad de los cultivos

•         El compostaje de los residuos reduce significativamente la cantidad de residuos que van al vertedero

Para compostar es básico disponer de materia orgánica, agua y aire.

Otro material necesario:

•         Compostador

Las características que deben presentar un compostador son: ser robusto, presentar espacios para la circulación de aire, disponer de una malla en su base para evitar la entrada de roedores y una tapa para evitar la entrada de agua en exceso cuando llueve. Debe ser colocado directamente sobre la tierra para facilitar la entrada de los organismos descomponedores y para favorecer la salida de los lixiviados.

•        Horca (para remover la pila de compost)

•        Regadera (o cualquier otro elemento que nos ayude a realizar pequeños y frecuentes riegos necesarios para el proceso de descomposición)

•        Tijera de podar (para reducir el tamaño de los residuos leñosos)

·         Termómetro (para controlar la temperatura del proceso de descomposición)

¿Qué podemos compostar?

Los materiales biodegradables son clasificados por el color, desde el marrón o castaño al verde. Los castaños son los residuos de jardín ya secos, como las virutas de maderas, hierba y hojas secas, paja, heno, serrín y plantas muertas. Estos materiales son ricos en carbono, el constituyente más abundante en la madera, y pobres en nitrógeno, el constituyente más importante de las proteínas. Los verdes son los restos de comida, vegetales y frutas, hojas verdes, etc. Son mucho más ricos en nitrógeno y en agua que los residuos de color marrón. La disposición de los residuos en un compostador se realiza alternando material seco y verde. Hay que prestar atención que la última capa de material siempre ha de ser de material seco para minimizar los malos olores que pudieran desprenderse en el proceso.

El proceso de descomposición ha de tener un acompañamiento continuo porque la falta o el exceso de agua pueden retrasar e interferir con los métodos metabólicos que conduncen al compostaje, por eso es conveniente regar y remover regularmente la pila de compost.

Los materiales que pueden o no ser compostados:

·         Restos de cocina: legumbres, frutas, cáscaras, cáscaras de huevos, pan, bolsitas de infusiones o café (sin restos metálicos), arroz, pasta, cereales, comida cocinada y restos vegetales de la comida.

·         Restos del jardín: hojas, hierba, tallos, flores, ramas, paja, heno, virutas de madera.

·         Otros: papel, cartón, paja, madera sin tratar, cenizas.

·         Evitar: grasas, productos lácteos, carnes, pescados y mariscos, cenizas en grandes cantidades.

·         No colocar: baterías, vidrio, metal, plástico, medicamentos, excremento de mascotas, plantas enfermas, restos de comida cocida (carne, huesos y pescado), malezas con semillas, residuos de plantas o cortes de hierba que han sido tratados con productos químicos

Factores que influencian el proceso de compostaje

Aireación – sin oxígeno los microrganismos no consiguen respirar y por consiguiente no consiguen realizar la trasformación de la materia orgánica. Es necesario remover la pila de residuos frecuentemente para inyectar aire al sistema de descomposición (buscamos que se produzca un proceso bioquímico llamado degradación aerobia -en presencia de oxígeno- y evitamos la degradación anaerobia -descomposición sin oxígeno-.

Humedad - para que los microrganismos puedan actuar eficazmente, la pila de residuos orgánicos debe tener cierto grado de humedad, sin encharcamientos.

Temperatura - debe medirse la temperatura periódicamente para mantener en la temperatura óptima de 60 a 65ºC.

Cómo resolvemos algunos problemas que puedan surgir

¿Cómo evaluar el material descompuesto?

El proceso de descomposición estará concluído cuando, al tomar una muestra en la mano, se cumplen los siguientes requisitos:

• Se adhiere a la mano (indicativo de capacidad de retención de agua)

• No tiene olor o tiene olor a tierra húmeda

• Tiene un color castaño oscuro

• Presenta una granulometría homogenea de forma que no se puede identificar el material original

El resultado de este proceso es un producto estable y rico en nutrientes básicos y microorganismos que aportan los nutrientes esenciales al suelo que alberga a los cultivos. El tiempo para usar este compost es de 2 a 12 meses.